La política, la ignorància i el risc.

Que la política necesita hoy más que nunca reflexión fue un principio compartido por todos. Comenzar por la nostalgia es algo muy parisino y hubo quien echó de menos aquellos grandes debates que tuvieron lugar hace veinte o treinta años. Alguno apuntó incluso que entre las causas del actual malestar hacia la política tendría que figurar un insuficiente trabajo intelectual, que debería ser corregido por una relación más estrecha entre los políticos y los pensadores. Pero las dificultades de esta relación tienen que ver con el hecho de que tanto el modelo del experto tecnócrata como el del intelectual comprometido tienen una idea de la superioridad del trabajo intelectual que no suele hacer justicia a la complejidad de las decisiones políticas ni a la lógica que rige los asuntos de la política donde, además de verdad y competencia, debe haber legitimidad y oportunidad. Mientras estas dos grandes lógicas de la reflexión y de la reflexión no se respeten entre sí, la relación entre ambas no dará lugar a una sociedad mejor gobernada, que es de lo que se trata.

Entre las exigencias que deberían acometer los que tienen como tarea la renovación del pensamiento político merecen ser recordadas la atención hacia una realidad que es cada vez más compleja (y de lo que suele desentenderse quien prefiere poner la crítica por delante de la comprensión), el deber de escuchar una mayor variedad de puntos de vista (de intereses, de métodos científicos) y la modestia, una virtud intelectual que vuelve tras un largo periodo en el que las seguridades ideológicas parecían haberla convertido en superflua. La sociedad actual recupera la ignorancia como algo que debe aprender a gestionar. Y se adivina que las principales polémicas políticas van a girar en torno a cuánta ignorancia podemos permitirnos, cómo podemos reducirla con procedimientos de previsión o qué riesgos es oportuno asumir. Como pudo comprobarse, algo muy poco heroico y demasiado humano, si lo comparamos con nuestras viejas certezas.

Daniel Innerarity, ¿En qué piensan los políticos?, Babelia. El País, 15/01/2011
http://www.elpais.com/articulo/portada/piensan/politicos/elpepuculbab/20110115elpbabpor_7/Tes?print=1

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